Ser bondadoso

En ocasiones, después de experimentar un acto de evidente malicia por parte de alguien, podemos sentir una intensa cólera o irritación que apenas podemos controlar. Incluso puede que pensemos en vengarnos de esa persona.

Sin embargo, reaccionar de manera mordaz rara vez nos lleva al resultado esperado. No solo genera resentimiento que puede permanecer para siempre entre ambas partes, también es posible que nunca se pueda restaurar la relación con esa otra persona después de expresar un sentimiento cruel en forma verbal. Arrastrados por el odio, podríamos sumirnos en una espiral destructiva. Imagina cuántas personas han cometido errores irreparables y han arruinado sus vidas debido a tantos sentimientos de envidia, rencor o rabia.

En momentos como estos, recordemos a Oyasama. A pesar de haber sufrido persecuciones en numerosas ocasiones, Ella nunca culpó a esas personas, ni siquiera pensó en vengarse. Por el contrario, ofreció comida a un policía que venía a arrestarla e incluso intentó comprar dulces para alegrar a un oficial a pesar de haber sido maltratada.

Al reflexionar sobre su Vida Modelo, no podemos dejar de contener las palabras hirientes que íbamos a expresar. Al pensar en Oyasama, nuestro sentimiento agresivo y el odio que albergamos se calman. Gracias a Ella, obtenemos la fuerza para vencer el lado cruel que reside dentro de nosotros.

Oyasama nos salva de elegir el camino equivocado y de caer en la oscuridad de la desesperación, y su Vida Modelo nos protege de ellos.

«Sé bondadoso».

La voz de Oyasama eternamente viva resuena en nuestro corazón.

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