Tsutome de Petición en la Sede por el cese de la pandemia – 1 de agosto

Volviendo a la imagen de dedicación sincera a la salvación

 

El primero de agosto pasado, la Sede de la Iglesia ofició el Tsutome de Petición en el Santuario Principal. Este Tsutome de Petición se viene realizando con el objetivo de orar por el cese de la pandemia del coronavirus y la recuperación de las personas afectadas, así como para reafirmar, en unión de corazones, el sentido que tiene recibir la gracia divina.

Al mediodía, el Tsutome de Petición se celebró con el Rvdo. Daisuke Nakayama, Sucesor del Shimbashira, haciéndose cargo del hyoshigi, y el Rvdo. Yoichiro Miyamori, Director General de Asuntos Religiosos de Tenrikyo, del kazutori.

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Previo al Tsutome, el Rvdo. Miyamori dirigió unas palabras. En vista de la situación actual en la que la propagación del coronavirus no se detiene, expresó que la cancelación tanto del Festival del Regreso de los Niños al Yiba, que había de celebrarse justamente en estos días, como la Fiesta del Sechi y las asambleas de cada asociación han provocado confusión y el sentimiento de adversidad en diversos aspectos por no poder celebrar los eventos que hasta ahora se habían realizado de modo ordinario.

Además de esto, refiriéndose a los versos del Ofudesaki: «¿Qué pensáis todos vosotros de este camino? No es nada fácil comprender» y «A toda costa, Tsukihi pasará este camino, manteniendo firme un sincero corazón» (Ofudesaki, X, 98 y 99), señaló que el significado de estos se atribuye a difundir la enseñanza de que la única sinceridad es la dedicación sincera a la salvación sin importar cuántas dificultades y sufrimientos haya. «A nosotros, los seguidores del camino, se nos enseña el Tsutome, se nos esclarece el Yiba y recibimos la Verdad del Sazuke, Don Divino, con el fin de dedicarnos sinceramente a la salvación», subrayó.

Para cerrar, el Rvdo. Miyamori mencionó: «Ahora es un tiempo en el que es difícil realizar cualquier cosa. Es probable que estemos en una época complicada para llevar a cabo la salvación, incluso sin la pandemia. Sin embargo, es en estos tiempos difíciles cuando debemos volver juntos y con firmeza a la imagen de la dedicación sincera a la salvación. Deseo que sea ahora el momento de entregarnos a la salvación».